El corazón humano de Dios

El Evangelio, para el autor, está fuertemente unido a su vida. La lectura del Evangelio, dice José Romero, no es una lectura cualquiera ni debe leerse de cualquier modo, sino desde el respeto a la Palabra y a la buena voluntad de los oyentes. Tampoco se puede comunicar de cualquier manera. Hay que explicarla con toda claridad, analizando la riqueza de su contenido, para que sea posible interiorizarla y hacerla parte de nuestra propia historia.En este libro comenta algunos pasajes del Evangelio: la curación de los enfermos, la fe del centurión y de la hemorroísa. También hace bellísimas exposiciones sobre las parábolas del «hijo pródigo» y del «buen samaritano», profundizando en la actitud de estos personajes tan conocidos como entrañables.Analiza la relación de Jesús con los representantes de la religión establecida, el comportamiento de los discípulos que lo seguían (sin entenderlo), la intimidad con su Padre y la extraordinaria humanidad, cercanía y amor con la que Jesús miraba y mira siempre al hombre y a la mujer. La sencillez y la claridad, el rigor y la valentía, así como la fuerza, la experiencia y la meditación del autor, adornada con pinceladas costumbristas, nos animan a recorrer aquellos caminos y a dejarnos impresionar por la increíble y extraordinaria personalidad de Jesús.